Las secuelas de las guerras y los conflictos: una de cada
cinco personas (22%) de quienes viven en un área afectada por una confrontación
tiene depresión, ansiedad y trastorno de estrés postraumático, trastorno
bipolar o esquizofrenia.
Atención a desplazados por el conflicto en Colombia. Foto Departamento de Estado USA
Pero eso no es todo: cerca del 9 % de las poblaciones que
sufren los conflictos tienen una condición mental de moderada a severa.
Esto sugiere un análisis de 129 estudios publicados en
The Lancet.
Unos datos mucho más altos que las estimaciones usuales
sobre esas condiciones mentales en la población general. Se creía que era 1 en
14 quienes padecían los problemas de salud mental.
Se encontró que la depresión y la ansiedad parecía
incrementarse con la antigüedad del conflicto y aquella era más común en
mujeres.
Tal parece, según este análisis, que estudios anteriores
subestimaron la carga de la enfermedad mental en áreas sometidas a conflicto,
con tasas más altas de condiciones severas en esta investigación, 5 % frente a
3-4 % de un estudio de 12 meses de 2005.
También en cuanto a condiciones moderadas, 17 % en
cualquier instante frente a 15 a 20 % en el periodo de 12 meses.
En general, la prevalencia media fue más alta para
condiciones de salud mental leves (13 %), mientras que para las moderadas fue
de 4 % y las severas 5 %.
El análisis revisó estudios de 39 países, publicados
entre 1980 y agosto de 2017, incluyendo 45 nuevos conocidos entre 2013 y agosto
de 2017.
No hubo datos suficientes para el trastorno bipolar y la
esquizofrenia, por lo que se tomaron estimaciones globales sin tener en cuenta
los grandes riesgos de que se presenten en un conflicto.
“Creo que nuestro estudio entrega las estimaciones más
precisas disponibles hoy de la prevalencia de condiciones de salud mental en
áreas de conflicto”, expresó la directora del estudio, Fiona Charlson de la
University of Queensland, Australia y el Institute for Health Metrics and
Evaluation, en USA.
Hoy hay guerras y conflictos activos con crisis
humanitarias en países como Afganistán, Irak, Nigeria, Somalia, Sudan Sur,
Siria y Yemen.
En 2016 el número de conflictos armados era 53 en 37
países cobijando 12 % de la población global
Valga considerar que unos 69 millones han sido
desplazados por esas confrontaciones, el número más alto desde la Segunda
Guerra Mundial.
Una situación no atendida en esos países, incluyendo
Colombia, donde el tema pasa ignorado así estas cifras muestren la gravedad.
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