Algunos de los hallazgos del telescopio espacial Spitzer. Foto Nasa/JPL-Caltech
Un telescopio ha muerto. Ayer a las 22:30 horas (Tiempo
Universal) los controladores de la misión lo pusieron en modo seguro. Es decir:
no volverá a funcionar.
Y fue uno de los cuatro grandes telescopios de la Nasa en
el espacio, el que nos regaló la mejor visión en infrarrojo del universo: el
telescopio espacial Spitzer, lanzado en 2003.
Los otros que han cambiado nuestra percepción del cosmos
son el Hubble, el Chandra de rayos X y el Observatorio Compton de Rayos Gamma.
Spitzer murió en su ley, allá en el espacio, desde donde
transmitió continuamente información que derivó en hallazgos, como un anillo
más en Saturno. Aportó en el conocimiento de asteroides y cometas, pero también
sobre la formación y evolución de galaxias en el antiguo universo. Y probó ser
eficaz para detectar planetas extrasolares: a él se debe el comentado hallazgo
de siete planetas tipo Tierra alrededor de la estrella Trappist-1.
Fue en 2016 cuando la Nasa decidió poner fin a su misión
en 2018, para ser remplazado por el gran telescopio James Webb. Como este se
retrasó, el Spitzer se mantuvo otro año en operación. El Webb, sin embargo, no
será lanzado hasta 2021.
El Spitzer tuvo una vida más larga de lo esperado. En
2009 casi que muere al haber agotado el helio líquido del sistema de
enfriamiento, necesario para la operación de dos de sus tres instrumentos.
Pero los científicos se la ingeniaron para mantener
activos dos de los cuatro canales de longitud de onda del tercer equipo. Así,
pudo trabajar 10,5 años más.
Entre sus hallazgos grandes figuran estos 15:
1. El primer mapa del clima en un exoplaneta.
2. Imagen de los comienzos de una estrella naciente.
3. Una colección de galaxias de hace más de 12 000 millones
de años.
4. Detección de los ingredientes de un cometa.
5. El anillo más grande de Saturno.
6. Hallazgo de buckyballs, moléculas esféricas de carbono,
en el espacio.
7. Colisiones en planetas extrasolares.
8. Análisis de la atmósfera de un exoplaneta.
9. Dos de los agujeros negros más distantes.
Ubicación del planeta más lejano. Imagen Nasa/JPL-Caltech
10. El planeta más lejano de la Tierra hasta ahora, a 13 000
años luz.
11. La primera luz de un exoplaneta.
12. Detección de asteroides pequeñísimos.
13. Mapa no visto antes de la Vía Láctea.
14. Fotos de galaxias en la infancia del universo.
15. Los siete planetas alrededor de Trappist-1.