miércoles, 29 de enero de 2020

Al fin se hizo justicia con la primera gata astronauta


Esta fue la primera gata astronauta, Félicette. Foto Wikipedia Commons


Ya era hora. Tuvieron que transcurrir 56 años para que se hiciera justicia con Félicette, la primera gata en ir al espacio y regresado sano y salvo. Una astrogata.
A finales del año pasado,  se descubrió la escultura en bronce que conmemora a esta ignorada héroe del espacio.

Félicette sobre la Tierra, escultura para rendirle homenaje. Foto Guy

Se encuentra en el International Space University en Estrasburgo, Francia, luego de la campaña comenzada en 2017 por un amante de los gatos, Matthew Serge Guy, que recibió contribuciones de 1100 personas para recaudar US$57 000.
“Es tiempo de que la Astrogata tenga su memorial que merece escribió Guy en la página de la campaña.
Félicette no fue el primer animal no humano en el espacio. Antes, tanto la entonces Unión Soviética y Estados Unidos habían enviado criaturas, siendo la primera la famosa perra Laika en 1957 (no sobrevivió) y un chimpancé, Ham, en 1961.
Eran ensayos, que hoy tendrían grandes cuestionamientos éticos, para allanar el camino a los humanos.
Félicette fue lanzada en octubre de 1963 desde una base en el desierto del Sahara y alcanzó una altura de 160 kilómetros sobre la superficie una altura suborbital.
Un vuelo de solo 15 minutos en el cual tuvo un seguimiento continuo de los científicos, midiendo sus signos vitales, su ritmo cardiaco a través de elctrodos en su cuerpo.
La cápsula que llevaba a la ilustre gata se separó con éxito del cohete y con su paracaídas aterrizó sin problemas.
Félicette sobrevivió, pero su futuro fue triste: unos meses después se le aplicó la eutanasia para estudiar su cerebro.
Contribuyó a la carrera espacial pero ha sido muy olvidada.
Este bronce le devuelve parte de su gloria.



No hay comentarios: