No solo elefantes se ponen nombres y se llaman con ellos, sino que ahora científicos descubrieron otra forma de comunicación: tienen una manera de decir "es hora de irnos".
El cuento es como sigue:
Estos grandes animales no humanos se reúnen al atardecer a beber en un lago para refrescarse. Luego, un adulto levanta la cabeza y gira del estanque, sus orejas se mueven suaves pero firmes y se produce un retumbe. Uno a uno los otros responden en un sonoro e infrasónico coro que se siente por la sabana. El mensaje es claro: es hora de movernos.
De modo gradual se giran y siguen a su líder hasta la próxima parada en las vagancias nocturnas del grupo.
Y por primera vez científicos de Stanford University y otras instituciones han documentado ese mensaje "vámonos" para irse del pozo de agua en el Parque Nacional Etosha en Namibia (África). Las vocalizaciones son iniciadas por los machos más integrados socialmente y a menudo los más dominantes en grupos sociales muy cerrados.
Este hallazgo, publicado en el journal PeerJ, es sorprendente porque se pensaba que esa era una conducta exclusiva de las hembras en los grupos familiares.
"Estamos sorprendidos de hallar que los elefantes machos, que se considera han perdido lazos sociales, se involucren en tan sofisticada coordinación vocal para generar una acción", explicó la cabeza del estudio, Caitlin O'Connell-Rodwell, investigadora de aquella universidad, quien agregó que "Estas llamadas nos muestran que hay mucho más en su comunicación vocal de lo que se conocía".
Ese retumbe fue registrado primero por ella en2004 en un trabajo de campo nocturno para entender cómo las vocalizaciones de los elefantes se propagan a través del suelo.
Con equipo de grabación de alta tecnología recogieron muchos datos en el ojo de agua Mushara, en especial en las estaciones secas. Usaron micrófonos muy sensibles enterrados y cámaras de visión nocturna para capturar las vocalizaciones infrasónicas, inaudibles para el oído humano, y el comportamiento de los elefantes machos.