Las plantas no son esos organismos quietos que solo mueve el viento.
Enraizadas en su sitio, las plantas no pueden huir de los herbívoros, pero pueden pelear. Al sentir el ataque, con frecuencia generan toxinas, emiten químicos volátiles para atraer enemigos naturales de las pestes o lanzan otras tácticas defensivas.
Ahora, por vez primera, investigadores, en la edición de junio de Plant Physiology identificaron una clase específica de péptido o señal de defensa, que les ayuda a las plantas a reaccionar ante un ataque de insectos.
En esta colorida estrategia de auto defensa, las proteínas presentes en la planta son ingeridas por los insectos atacantes. Digiriendo las proteínas, los insectos involuntariamente convierten el alimento en el péptido, que es segregado de nuevo a las plantas en otros ataques de los bichos. Entonces, ante futuros ataques, las plantas reconocen la sustancia y reaccionan para defenderse.
Plants vs. insects
The plants are not those quiet organisms that the wind only moves.Rooted in their sites, the plants cannot run from herbivores, but they can fight. When they feel being attacked, frequently generates toxins, emits volatile chemicals to attract natural enemies of the plagues or sends other defensive tactics.Now, for the first time, investigators, in the edition of June of Plant Physiology identified a specific class of peptide or signal of defense that help plants react before to attack insects.In this colorful strategy of self-defense, the attacking insects ingest proteins present in the plant. Digesting proteins, the insects unwittingly convert this food into the peptide that is secreted again to the plants in other attacks of the tiny beasts. Then, before future attacks, the plants recognize the substance and react to defend themselves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario