martes, 10 de septiembre de 2024

Le dije que no me comiera

Uno de los videos que muestra el escape de la anguila. Hasegawa et al/Current Biology


Parece una película de terror, que genera gritos entre la audiencia. Pero no, es de la vida real. E involucra dos animales de agua: un pez común en Japón y Corea, y una anguila.

¿De qué se trata? El pez, un durmiente oscuro (Odontobutis obscura), se come la anguila. Lo que para muchos individuos significa la muerte, no para la anguila: se escapa a través de las agallas del pez y sale viva y coleando.

No es solo un caso, científicos ilustraron varios en video y presentaron el hallazgo en Current Biology.

Los investigadores pensaron en un comienzo que la anguila escapaba por la misma boca por donde fue tragada, pero no. Entonces, ¿cómo escapa? Retrocede desde el tracto digestivo hacia el esófago del pez, luego mete la cola entre las agallas, hasta que sale por completo.

Para Yuha Hasegawa, primer autor, de Nagasaki University, "Sin embargo, contrario a nuestras expectativas, viendo el desesperado escape de la anguila a través de las agallas fue sorprendente para nosotros".

El estudio comenzó con 104 anguilas japonesas, que metían de a una en un tanque con un pez durmiente oscuro de una colección de 11.

El equipo grabó32 anguilas siendo capturadas y tragadas por el pez. Aquellas habían sido inyectadas con sulfato de bario para seguirlas con rayos X. Algunas entraron al estómago del pez y se les observó girarse en un intento por escapar.

Nueve anguilas escaparon  con la cola saliendo primero, cuatro sacaron la cola pero no pudieron salir del todo y dos fallaron porque pusieron la cola en sentido equivocado.

Este parece el primer estudio que revela el éxito en el escape de las anguilas. Ha habido estudios con las anguilas, pero en esos no salieron vivas.

Hasegawa aclaró un aspecto muy importante, indicando que "El pez depredador no resultó herido, aunque algunas anguilas que escaparon sí presentaron abrasiones".

No hay comentarios: